Jinx!

Usualmente, tengo buena suerte. No es que me gane un auto o dinero, pero tengo buena suerte con detalles pequeños de la cotidianidad. Mi suerte se la aludo a Dios, un tanto pagano mi pensamiento pero en fin. Cada cierto tiempo tengo un día de mala suerte. Un día para que el universo mantenga su equilibrio. Mi día negro, como lo nombré, fue el pasado viernes.
Mi mamá me había depositado la noche anterior dinero para el mes y decidí ir a comer a un lugar bonito. Invité a un amigo para que nos regodeáramos de comida, ya que hacer acto "cerdil" sola puede ser bastante vergonzoso y triste.
Yo no había ido al cajero porque podía pagar con Redcompra, así que era como lo mismo. Despreocupada comí y comí, y comí, y comí ¿y dije que comí?
En fin, 6 o 7 platos después con mi barriga aumentada en 6 o 7 cms. y un monto creciente a $13.500 aproximadamente, pedí la cuenta. "Redcompra", dije con una sonrisa al momento de pagar. Pasaron mi tarjeta, acepté el monto e inserté la clave. "Débito denegado", leí. Casi se me cayó el pelo. "No puede ser, tengo x dinero en la cuenta", me dije. "Debe ser un error, iré a sacar dinero", le comenté a la mesera.
En un cajero del Banco de Chile le hablaba a Dios mientras apretaba las opciones para sacar dinero. "Por fa, que no se haya caído el sistema. Si tengo dinero. Tú lo sabes, yo lo sé. Entonces ¿por qué no me pasa la plata?", exclamé irritada. "$0 pesos", leí.
Molesta hasta los codos, es un nuevo decir que escuché por ahí, volví al lugar. "No pude sacar plata. Sale que tengo cero pesos, es imposible", le dije a mi amigo. "Te dije que sacaras plata antes de venir. Pero dijiste: 'No, si tengo y pago con Redcompra'", me respondió. "Pero si tengo plata. No puedo sacarla, que es distinto", agregué.
Luego de varias llamadas telefónicas a mi mamá, de saber que la red se cayó en todo el país, de que mi amigo fuese a buscar dinero a su casa para pagar, de que yo entablara una pseudo conversación con el gerente y, de que mi amigo volviera y pagara. Nos fuimos.
Un tanto avergonzada, pero más molesta, tomé el metro. Mi hermana me llamó al celular y me contó que encontró un bicho en la papa frita que estaba a punto de comerse. "Creo que hoy no es un buen día para los géminis y la comida" me dijo. "Creo que leeré mi horóscopo para la próxima", afirmé.